Ya sea en el interior o en el exterior, seguimos respirando aire contaminado. En efecto, el aire puede contener contaminantes de diferentes categorías. Hay partículas químicas procedentes de materiales de construcción, productos de bricolaje o productos de limpieza. Hay contaminantes físicos procedentes de la quema de velas o del tabaco. También hay partículas biológicas aportadas por bacterias, mohos y pólenes. Inhalados, estos contaminantes pueden ser perjudiciales para la salud. Y para combatirlo, algunos individuos utilizan purificadores de aire. ¿Son realmente eficaces en la lucha contra la contaminación atmosférica?

Purificadores de aire: ¿cómo funcionan?

Como su nombre indica, un purificador de aire purifica el aire dentro de la casa. Se compone de una capa de filtros. El primero capta los contaminantes gruesos del aire aspirado. A continuación, el aire pasa por un segundo filtro, conforme a las normas HEPA, que es capaz de almacenar partículas, concretamente polen y ácaros. Un tercer filtro con carbón activado condena los humos y los malos olores. Al final, el dispositivo impulsa el aire purificado.

Cabe destacar que el purificador de aire es capaz de filtrar contaminantes de hasta 0,3 micras. Algunos aparatos equipados con un filtro HEPA pueden purificar el aire hasta un 99%.

¿Qué partículas son resistentes a los purificadores de aire?

Algunas sustancias pueden escapar de los purificadores de aire, especialmente las que son volátiles, como los COV. Existen en el mercado algunos aparatos con un filtro de carbón que es capaz de condenar estas partículas. Sin embargo, para ser eficaz y evitar el riesgo de liberación, este accesorio debe ser eficiente tanto en términos de cantidad de carbón como de calidad del filtro.

Purificadores de aire: la eficacia varía según varios criterios

Para luchar contra la contaminación del aire interior, la eficacia de los purificadores de aire depende de muchas condiciones. Estos dispositivos deben ser adecuados a las dimensiones de la habitación a tratar o incluso a las de toda la casa. También hay que tener en cuenta el número de partículas que hay en la sala. Es importante comprobar regularmente el estado y la calidad de los filtros para que puedan cumplir su función. Por último, no olvide cambiarlos regularmente para estabilizar el nivel de captación y evitar el consumo excesivo de energía.

El purificador de aire es un dispositivo necesario para ayudar a limpiar el aire dentro de la casa. Para los asmáticos y alérgicos, este equipo puede aliviar los desagradables síntomas. Pero para obtener la mejor eficacia, es necesario elegir el modelo más adecuado.